jueves, 31 de marzo de 2011

BENDECIR O COMPETIR

     He estado notando, con mucha preocupación, a diferentes líderes funcionando de manera contraria a su diseño. Paradójicamente les veo respirar sin disfrutar cada respiro, reír sin estar contentos, algunos duermen en confortables camas pero no descansan y siempre están buscando un "enchufe" cercano para recargar las baterías de sus vidas.
     Definitivamente algo está mal. No están funcionando de acuerdo al diseño que Dios les dio como líderes. Permíteme compartirte este pensamiento:
     "Nuestro liderazgo está asociado a bendecir, no a competir"
     Hoy en día hay muchos líderes compitiendo hasta con sus esposas o esposos. Lo mismo hacen en sus trabajos y compiten hasta con sus empleados, a sabiendas de que fueron ellos mismos quienes les contrataron. La competencia es una mancha de aceite debajo de tu auto. Algo no está funcionando correctamente.
     - Por estar compitiendo "Lucifer" fue expulsado del cielo.
     - Por estar compitiendo algunas iglesias son agencias caza-talentos.
     - Por estar compitiendo el mundo está lleno de armas y elementos bélicos.
     - Por estar compitiendo siempre alguien sale perdiendo.
     Querido líder, con mucho respeto debo decirte que se trata de bendecir y no de competir.
     Sin darnos cuenta, estamos siendo influenciados negativamente por el sistema y como consecuencia estamos funcionando de manera incorrecta. Las emisoras de radio están anunciando quién está de primero en las listas de los más sonados o más solicitado y los canales de televisión están haciendo concursos para ver quién graba el mejor vídeo.
     ¡Ten cuidado con esto! No estoy diciendo que la excelencia sea algo negativo. Sólo te estoy recordando cuál es tu diseño.
     Filipenses 2:3-4 nos enseña: "No hagan nada por rivalidad ni orgullo. Sean humildes y cada uno considere a los demás como más importante que sí mismo. Que cada uno no busque sólo su propio bien, sino el de los demás"
     Pablo entendía el diseño que tenemos y lo importante que es saber qué hacer y cómo "NO" hacerlo.
     - No hacerlo por RIVALIDAD (Competencia) ni por ORGULLO (Reconocimiento)
     Veo a muchas emisoras de radio y canales de televisión trabajando duro en esto:
     ¡Llama ya! vota a través de la web y dinos ¿cuál es la mejor canción o vídeo? La canción que más peticiones tenga, será la mejor de todas (competencia) y será la canción del año, la colocaremos hasta en el Facebook! Le daremos un premio (reconocimiento).
     Entonces ¿Qué estamos haciendo? Parece que justo lo opuesto.
     Estimar a los demás como superiores a sí mismo requiere de humildad. Tal vez sea esto último lo que nos está haciendo falta.
     Déjame darte un ejemplo final: Si tomas una herramienta como una tijera de cortar papel y comienzas a usarla como una piqueta de electricidad, te darás cuenta que en poco tiempo dejará de funcionar. "Fue diseñada para cortar papel, no cables de electricidad"
     Muchos están compitiendo porque de alguna manera le está funcionando, están creciendo, ganando dinero, les están aplaudiendo, pero en cualquier momento dejarán de funcionar ya que ese no es su diseño.
     Un abrazo, les bendigo.

Fuente: Alejandro Cisneros

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